Fuente/Source: Diana Gabaldon en Compuserve
13 de Junio de 2015.
Traducción: Susana Imhof.
«Queridas Kate (Amy, Heidi y todas)
Veamos, cuando se está describiendo algo Terrible (uno, hablando desde un punto de vista puramente artístico) necesita tener en mente dos cosas: los límites y la especificación de detalles.
Demasiadas palabras, demasiada emoción expuesta, demasiado relato, opacan la claridad, y claridad es lo que hay que lograr para llegar al máximo impacto. Como escritor lo que se debe hacer es tomar distancia, alejarse de lo que se describe, lograr que haya mucho espacio en blanco alrededor de ello.
Es por eso que no escuchamos todo lo que Jamie le dice a Claire, la mayor parte de su atención está enfocada en él, en la evidente desesperación y sufrimiento que experimenta al narrarlo. Nos brinda un punto de referencia emocional, vemos lo que significó para él, pero también apreciamos con suficiente dimensión el hecho en sí mismo.
(Le dije a Tobías, que lo que más le admiro como actor es que comprende el principio de dominio de sí mismo al pie de la letra. Incorpora todo lo inherente al personaje dentro de sí, pero no lo deja salir del todo, solo muestra destellos del mismo en su rostro, como la luz de una vela sobre una pared).
Pero entonces se necesita un detalle vívido, específico, como un clavo que atraviesa el corazón del lector y lo clava a la escena. Algo que he notado en todo lo dicho recientemente sobre violaciones, (no en este foro, sino culturalmente), es que el tratamiento es despersonalizado, se habla generalizando, de modo que no se siente como la violación a un ser humano y su psiquis que realmente es. Se dice mucho que “la violación es SIEMPRE un crímen de poder y no de sexo”, y hay poca descripción de lo que realmente sucede.
Nos dicen que la gente queda devastada por este crímen, evidentemente es cierto, lo escuchamos aquí (y en la publicación de mi página en Facebook), de muchas personas valientes que nos han entregados sus historias, y estas historias son más potentes y más movilizadoras que millones de personas marchando en las calles con pancartas diciendo “No a la violación”.
Pero aquí me aparto un poco del tema (cof, cof). El detalle del semen de Randall entre las piernas de Jaime, junto con la delicada referencia de la pérdida del control (una parte metafórica, ¿si?) de esfínteres cuando muera, nos deja en claro la exasperante repugnancia de lo sucedido. Nos retorcemos, y lo sentimos.
Recientemente conversaba con Sam Heughan sobre cómo está Jamie emocionalmente, al comenzar la segunda temporada. No relataré toda la charla, pero así comenzaba:
“¿Conoces la expresión, 'la procesión va por dentro'?, así esta Jamie en este punto."
Wentworth está a flor de piel. No han pasado más que unas semanas; y por más rápido que sane, aún siente en su cuerpo los efectos de aquellas horas. Está bastante acostumbrado a ignorar el dolor físico y continuar con lo que hay que hacer, pero esto es insidioso y degradante. Su mano le duele literalmente todo el tiempo, a menos que elija beber bastante (y a veces lo hace, cuando se encuentra en circunstancias en las que beber lo ayuda, pero es demasiado experimentado para darse cuenta que no puede depender de eso, y es lo suficientemente testarudo como para querer librar sus propias batallas sin este tipo de "ayuda". Puede que se sirva un vaso de vino o whisky, beba la mitad y luego lo deje de lado. No puede hacer algo tan simple como mover el vientre sin tener un humillante flash de recuerdos; está privado de la intimidad que tenía con su propio cuerpo, y no puede permitirse aceptar intimidad con Claire, lo que le daría una sensación de integridad de sí mismo.”
¿Son capaces de ubicar los "detalles narrados" aquí? Por supuesto que sí, como también observaría el Capitán Randall. No puede hacer nada tan simple como mover el vientre, sin sentir humillación, desolación y furia. Suena cierto, pero no es algo que se le ocurriría a alguien, al pensar en cómo se siente un hombre que ha sido violado. Es tarea del escritor – y del actor- pensar más profundo y hallar esos detalles específicos que hacen que la experiencia sea terriblemente clara. El escritor lo hace explícito en la página, el actor lo hace internamente, pero los resultados son similares.»
Se me erizan los pelos !! Que análisis !!! Quita el aliento !!
ResponderEliminarEvidentemente ni la autora ni los actores han dejado nada librado al azar. Profesionales. Comprometidos. Brillantes!!!
ResponderEliminarestoy totalmente de acuerdo, me plantee ver por encima los dos últimos capítulos, porque lo pase realmente mal leyendo el libro e imaginando las escenas tan espeluznantes que Diana me describe y yo hacia realidad en mi pensamiento, pero luego pensé que era una estupidez no darme la oportunidad de ver todo lo que Sam , Tobias y Cait junto al gran elenco de actores y productores me ofrecían en esas imágenes. Me arme de valor pero compartí esos gestos escritos por Diana y llevados a la pantalla por estos grandes actores que hablan con gestos, miradas y expresiones sublimes que hacen de una vivencia tan espeluznante una pequeña obra de arte. Si a Jamie le quedan largos días de sufrimiento y la triste realidad es que en la vida cotidiana pocos/as consiguen olvidar o al menos recuperar lo que estos ´mal-nacidos¨ le arrancaron: su intimidad y libertad de volver a ser ellos mismos.
ResponderEliminarExcelente análisis, la tiene tan clara que uno comprende el fenómeno que son sus libros y ahora la serie. Es una gran observadora del comportamiento humano además de una obsesiva investigadora. No deja nada librado al azar.
ResponderEliminarImpresionante la descripción! Jamás se me hubiera ocurrido pensar en esos pequeños detalles tan importantes en su día a día. Esta mujer es excepcional y el trabajo de Sam para hacernos sentir su estado de ánimo sin palabras....es brillante! Vaya par de genios!!
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